Tres grandes en su laberinto

¿Qué tienen en común River Plate, San Lorenzo y Racing Club? Que sus momentos futbolísticos no son buenos (aunque hay varias variaciones). Eliminaciones, mitad de tabla, descenso, etcétera, son las palabras que aquejan a dichos equipos, aunque algunas cada una.

Más nieve a la bola

Último momento: Faltan 13 años para que se iguale el record de la mayor sequía riverplatense. A pesar de que no es nada al lado de los 21 años sin torneos de Racing (contando la Supercopa –hoy Copa Sudamericana- de 1988), la sequía que duró hasta mediados de los ’70 es uno de esos tantos recuerdos que no se quieren repetir en un futuro. Pero, de la mano del insoportable, impresentable y corrupto José María Aguilar (a mi juicio, un hincha de Boca infiltrado en las filas de River –lo digo yo que soy del Xeneize-). A los tantos conflictos que tuvo durante sus 6 años de mandato (fracasos en varios torneos, ya sean nacionales e internacionales; su complicidad con Los Borrachos del Tablón; delicada crisis económica; entre otras) se le agrega el papelón en la Copa Libertadores, una cosa que no vale la pena contarla, ya que hasta De La Rua sabe qué pasó allí. Allí sucedieron varias cosas: el maíz a los jugadores (para los que nos decían sobre aquel episodio de las banderas negras 14 años atrás), las críticas de Carrizo y de Ahumada, el conflicto con Ortega (quién le cerró el orto a Simeone contra Huracán –dicho sea de paso, la camiseta violeta que usaron, directo a “En el placard” de “En una baldosa”-), etcétera. Pero a pesar de ello, está peleando el campeonato. Más allá de ser de Boca, no quiero que gane el Millonario. ¿Por qué? Porque pienso que esto sería más coherente de acuerdo a su presente.

Del paraíso al infierno

San Lorenzo, hasta hace una semana, era el Manchester United. Hoy es Excursionistas. A pesar de que el archiodiado club de Guido cayó de una manera digna ante la ¿invencible? Liga de Quito, ésta derrota (a pesar de no ser tal, quedaron eliminados por penales) desnudó los conflictos en el equipo que ahora está en el Bajo Flores. Se enfentaron todos los referentes contra Ramón Díaz, ya sean por los hijos baldoseros del técnico y por varias conductas del técnico. Esto ocasionó la renuncia de Ramón. Bah, sigue hasta el partido contra Gimnasia de Jujuy.

Una promoción que sale muy cara

El 2001 parece muy lejano para Racing. Allí tocaba el cielo. Pero ahora está en el límite entre el manto superior y el manto inferior. Si el torneo se termina hoy, jugaría la temida promoción contra Chacarita, Quilmes o Atlético Rafaela. Aunque, si Gimnasia de Jujuy gana lo que resta, y Racing no, cambiaría el rival: jugaría contra Belgrano (a menos que se dé un giro inesperado en la tabla de la B Nacional), si mal no me equivoco. Pero eso no es solo lo que aqueja a la institución de Avellaneda. Los inquilinos de Independiente también sufre al gerenciamiento, aquel que hace 7 años vitoreaba la hinchada (un claro ejemplo de que mandan los resultados, aunque también se mandó varias cagadas Blanquiceleste), tal como dice Víctor Hugo Morales. Fernando de Tomaso quiere seguir (afanando) hasta las últimas consecuencias. Pero va a tener otro rival, además de la hinchada, que le hace la cruz a BC (no las mermeladas dietéticas –cuac-): Héctor García Cuerva, quién reasumió como interventor del club, va a hacer todo lo imposible para que se vaya Fernando II (Fernando I es Marín, el anterior gerenciador). Aunque el SARCAC, el MODERA y las Filiales de Racing también se oponen. Roberto García, miembro del segundo grupo mencionado, dijo que los que quieren sacar a De Tomaso se “veletearon”. Los hinchas siguen expresando su disconformismo, no solo con el adícto a los alucinógenos (dijo que Racing no solo podía evitar el descenso, sinó que iba a pelear el campeonato), sino a los jugadores y al “grupo de notables”. Hubo varias banderas en repudio: las tres más originales, a mi juicio, fueron:

-“Nosotros 10 puntos todos los domingos, ustedes 10 puntos en todo el campeonato”
-“Racing es mi vida, no tu empresa”
-“De Tomaso: si los demás nos tocan el culo, vos nos violaste”

Bueno, los dos grandes que “zafan” (no se hasta qué punto) son Boca e Independiente. Los primeros, son los únicos argentinos sobrevivientes de la Copa Libertadores, y a pesar de que tiene chances matemáticas de ganar, va a hacer un pleno al torneo continental. Y el rojo, que hace 10 fechas era un polvorín, gracias a Pepé Santoro (el bombero que apagó mil incendios); pero no tanto al Bichi Borghi (admitió que su esposa le dijo que “Santoro tenía que seguir”), está peleando el ingreso a las copas, y aún tiene chances en el torneo local, pero muy remotas. Vamos a ver si la Banda, el Cuervo y la Academia salen del laberinto, o tendrán el mismo final que el mítico Minotauro.