domingo, 2 de marzo de 2008

El condimento


Ya sabemos que el partido entre el Barcelona y el Atlético de Madrid es un clásico, a pesar de que los une el sentimiento antimadridista. Pero desde hace 2 años, al clásico se le agregó un condimento especial: el enfrentamiento entre Messi y Agüero, dos de los mejores futbolistas del país (por no decir del mundo). Ellos son tan amigos como Serrat y Sabina (que casualmente son culé y colchonero respectivamente). En total se jugaron 4 partidos. El primero fue a fines del 2006, aunque Messi no jugó aquel partido en el Nou Camp. El que si jugó fue el Kun, y metió el gol del empate final. El segundo fue en Mayo de 2007, y el escenario fue el Vicente Calderón. Los blaugranas humillaron al Aleti, y se comieron media docena de huevos. De esos 6, 2 fueron de Lio. ¿Y Agüero? Estaba en el banco, aunque entró en el período final. El tercer partido fue en tierras catalanas, en el mísmo día del superclásico, y en el mísmo día de aquel partido entre Los Pumas y Escocia en el marco del Mundial de Rugby. De vuelta ganó Lionel, y otra vez mojó, pero solo por una vez. Agüero estuvo desde el arranque. Por último, ayer, en el estadio colchonero, fue la gran noche del yerno de Maradona (tenía que ponerlo): dos goles, una asistencia, y además le hicieron un penal. En tanto que la Pulga entró en el complemento. En las estadísticas, Agüero está empatado con Messi con 3 goles en esta clase de partidos.
Bueno, aquí termina el repaso del duelo entre el Aleti y el Barsa. Puse en el principio lo de Sabina y Serrat porque en Agosto, en China, Lio y Kun harán una gira (obviamente, junto con otros jugadores, como Román, Demichelis, Mascherano, etc.) con un objetivo: la medalla dorada.

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