"Todo pasa, todo queda..."

"... pero lo nuestro es pasar". Esta frase es de Serrat, pero tranquilamente se la podremos adjudicar al Capo Mafia y sus secuaces. Obvia y naturalmente, estamos hablando del hijo de puta (disculpen, pero es el calificativo que mejor le queda) de Julio Humberto Grondona. Él se hace bien el boludo, pero es casi una verdad de perogrullo que ayuda a las barras, las cuales ayer se mandaron otra cagada que se suma a la larga lista.
Los "hinchas" (lo pongo entre comillas porque no se si son hinchas verdaderos), para algunos de Huracán, para otross de San Lorenzo, emboscaron a los de Vélez, y el resultado fue nefasto: Murió Emanuel Álvarez, hincha velezano. Y no lo pongo entre comillas, ya que, a mi juicio (y al de muchos), no era barra. Y el viernes hubo un episodio poco comentado: en el clásico de Salta (Gimnasia y Tiro-Central Norte) mataron a una hincha.
Regresando al lamentable hecho de ayer, ni bien los equipos salieron a la cancha, los de Vélez empezaron a hacer un quilombo desmedido, pero comprensible, para que se suspenda el cotejo. Los jugadores de Vélez pidieron calma, hasta que se enteraron que había un muerto en el medio. Y ahí ellos (los jugadores) también querían que se suspendiera. El árbitro, Hector Baldassi, en una desición sensata (y a contramano de lo sucedido en Heysel hace 23 años en el Primer Mundo Europeo), decidió suspender el partido. Otro partido suspendido, pero sin incidentes de por medio, fue el de Gimnasia Jujuy-Lanús, ya que no habían suficientes policías.
Pero, volviendo a Grondona, una de las causas de por qué es complice de las barras es la televisión. Él prefiere que un encuentro tenga mil puntos de rating, y que el estadio esté vacío, antes de que no lo vea nadie (por la tele), mas la cancha esté llena "hasta la bandera". Y eso fue lo que motivó que Julio Humberto, junto con sus "amigos de TyC, haga que los 190 partidos del torneo sean televisados, y que las populares cuesten un huevo y la mitad de otro. Por otra parte, Ale Ro, uno que comenta en Valechumbar, dio varios motivos de por qué los dirigentes no actuan en este post: http://www.valechumbar.com/item/4360
Estaría bueno que algún día, los que amamos de corazón este deporte, hagamos una marcha para que pidamos, pacíficamente, la renuncia. Para muchos es imposible, pero, como diría el slogan de Adidas, "Impossible is Nothing". Para mí, una renuncia del Capo Mafia, va a tener un gran beneficiado: el Fútbol

Desde acá, mis condolencias para los familiares y amigos de Álvarez.